No te estoy diciendo que no puedo... Te estoy diciendo que sin tí me es más dificil lograrlo. Que no sé como pedirle tu mano que me sostenga, que no solo pierdo el equilibrio, que también perdí el rumbo. Es que pensé que sin importar el camino que tomara, este sería tu lado. Y sé que parezco fuerte y autosuficiente... y aún así, sin tí me siento frágil,como un cristal de hielo que derrite gota a gota y al chocar con el suelo solo se hace trizas. Te lo he pedido muchas veces y aún cuando oyes no eres capaz de internalizar la fuerza que me da tu compañía. Tu sola presencia me hace sentir ese algo inexplicable que va por mi pecho rodeando mi cuerpo y me hace sonreir sin motivos aparentes. No te hice invisible, tu te sentiste desvanecido y ausente de tí y colocaste en tus creencias palabras mal interpretadas de todo lo que dije. Hasta en tu ausencia la esperanza ilusorioa de tu regreso me sostenía, pero de un sueño siempre se despierta y al abrir los ojos solo hay una sensacion de caida libre y de espalda, dode no sé si estoy cerca o lejos de llegar al piso... solo esa brisa fría que recorre mi cuerpo y que no dá un ápice de señal de tocar fondo. El que pueda sostenerme no hace que las ganas de ser sostenida se vayan. Si tengo ganas de tu sostén, de tu fuerza, de tu brazo tomando el mío o de tu hombro para apoyandome. Solo toca seguir sin tí y repara los daños para tener la fuerza de mover los pies libremente, sin garantías de nada.